Este hombre clarividente y empeñado en enseñarnos con la paciencia de la prosa sencilla y cuidada todo aquello que ansiamos conocer (ciencia, historia, biología, comportamiento, ...) también tenía las ideas muy claras en cuanto al futuro que nos esperaba. Como un Julio Verne del último siglo, sus libros de ciencia ficción van acercándose a pasos agigantados a la realidad y sus ensayos científicos hablan ya de un presente que, cuando los escribió, parecían inalcanzables.
Hoy os traigo al blog una pequeña entrevista que le hicieron en la que 35 años antes de que Internet fuera lo que es en la actualidad, ya tenía muy claro a dónde nos dirigíamos y, lo más importante, qué podríamos hacer con tan maravillosa fuente de conocimiento.
La escuela sería diferente si cada uno de nosotros tomáramos en serio sus palabras y decidiéramos aprovechar la oportunidad para disfrutar del conocimiento por nosotros mismos. Ya no hay excusas para no mejorar en aquello que nos interese o nos guste.
